Del mismo modo que a la sombra del
éxito del PSOE, nacieron esas malhadadas PP del Partido Popular, ahora tenemos
que la innovación de Podemos propicia la aparición de este C’s que nace
parasitando a UPyD y que el plumero de lo que es se le ve por el ciego que
fichan para sus filas: Ni recuerdo su nombre, creo que Miguel Durán, el que al
mando de la ONCE consiguió de un gobierno, de los tantos ineptos y corruptos
que hemos tenido, y a base de intrigas capitalistas, la concesión de una
frecuencia televisiva que se convertiría en Tele 5 y que inmediatamente puso a
disposición de un tal delincuente conocido por presidente de Italia (aunque lo
único para lo que esté capacitado de dirigir sea cualquiera de las tantas
mafias y cosas nostras de su variopinto país); ese Miguel Durán y sus sucesores
acusados de explotación laboral por todos los ciegos que tienen al punto
trabajando para su organización (no se sabe si más mafiosa que benefactora de
ciegos y otros discapacitados); ese Miguel Durán abogado de políticos y/o
empresarios rateros del PP y sus tramas de corrupción.
El silencio más monumental o el
desprecio señalándoles de incapaces a los economistas de Podemos; y desde que
el C’s presenta su programa económico, ninguna televisión y demás medios de
comunicación, tan incapaces y corruptos como la política y la banca que nos han
conducido a la ruina (¡O NO NOS DEJÓ SALIR DE ELLA NUNCA!), dejan de hablar del
economista de cabecera de Ciudadanos cual si fuese la lumbrera de la tal
disciplina.
Este es el bochornoso país que
nos ha tocado: A pesar del esfuerzo de ciudadanos sumidos en la ruina por
algunos crear y muchos otros colaborar y creer para dar vida a un órgano
político que de veras sea la voz del pueblo, la política, y sobre todo al filo
de las elecciones, se dirime, se publicita en todos los medios de masas, ya
definitivamente de derecha a derecha: De PP a C’s.
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Aproveché este blog, cajón de sastre para tantos y tantos pensamientos e ideas y dedicado a la poeta Alejandra Pizarnik, aproveché, después de borrarlo, para utilizarlo como desahogo ante la espeluznante corrupción que después de 40 años de sufrirla los españoles peor posicionados socialmente, ahora empieza a aflorar